Y la mejor manera de agradecerlo fue el hambre voraz con que nuestros peques devoraron su desayuno, muchos repitieron e imaginamos que ese día poco comieron en sus casas.
Para celebrar nuestra fiesta particular y a pesar del viento, también decoramos nuestro rincón andaluz con todos los platos, abanicos y demás elementos que habíamos preparado previamente en casa. Fue muy divertido, no faltaba la guitarra, la mesa camilla y una silla andaluza que daban más ambiente de fiesta a nuestro pequeño patio. Pero sobre todo un par de gitanillos con los que nos hicimos unas fotos.
Y como ya va siendo costumbre, D. Manuel del Ayuntamiento de Roquetas nos acompañó con el equipo musical con el que pudimos amenizar la fiesta con sevillanas y sobre todo escuchar y cantar nuestro himno de Andalucía.
Eso si, a falta de bandera, nosotros y nosotras hicimos una con folios de colores blancos y verdes ....ahí os dejamos nuestra particular bandera, gracias a las fotos que la seño María Jesús hizo desde el techo de las prefabricadas.....olé, olé y olé.
